La Historia
Hace casi 100 años la Compañía Eléctrica Sevillana, ahora ENDESA Generación, emprendió la monumental tarea de construir con hormigón la presa de Hundidero de 75 m de altura en el imponente desfiladero donde el río Gaduares desemboca en el 4,5 kilómetros sistema de cuevas, el más largo de Andalucía. Participaron ingenieros de toda Europa. Se construyeron caminos, se preparó el terreno, se contrataron técnicos y trabajadores locales y en marzo de 1924, la presa y la infraestructura estaban casi terminadas.
Desafortunadamente, el lecho rocoso del embalse es piedra caliza – un desagüe natural. Este embalse se llena con las lluvias de invierno, pero en verano el agua se ha filtrado en el sistema kárstico dejando seco el lecho del río. Se dice que un día un jubilado del pueblo fue al sitio de construcción e informó a los ingenieros incrédulos «Para cuando se termine, podré beber en un día toda el agua que captarán con la presa». Nació y se crió en Montejaque y estaba en lo correcto. En 1929, después de una lucha de cinco años tratando de tapar la piedra caliza con arcilla, se sometieron a la naturaleza y el sitio ha sido abandonado hasta ahora.
Las Acciones
Con motivo del centenario de la construcción de la presa hemos acometido juntos su proyecto más ambicioso y han regenerado este lugar abandonado e inaccesible, lo han hecho seguro y con sensibilidad estética han restaurado el acceso a este espectacular lugar para que los habitantes y visitantes puedan disfruta y atesora; dinamizar la economía local, luchar contra la despoblación y recuperar su patrimonio cultural y etnográfico; promover la inclusión, la apropiación y mejorar la calidad de vida. Hemos tenido éxito en nuestro objetivo y seguimos participando e invirtiendo en su sostenibilidad futura.